Ríndente al blanco

María Bausán María Bausán
Vivienda Unifamiliar en casco histórico protegido, emase emase ห้องนั่งเล่น
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Uno de los grandes debates a la hora de plantear proyectos de reforma es marcar el límite entre lo que debe mantenerse y lo que hay que renovar. Lo viejo tiene carácter y aunque a veces se vea desfasado o antiguo, en ocasiones es difícil saber cuando merece la pena mantenerlo y cuando cambiarlo radicalmente. El equilibrio es complicado, pero es el pan de todos los días para muchos de los arquitectos e interioristas especializados en reformas. 

Es el caso de de este proyecto del estudio de arquitectura madrileño Emase. En esta ocasión, el edificio a reformar tenía la etiqueta de histórico protegido, por lo que había ciertas limitaciones ya impuestas. La solución pasó por conservar la geometría de la edificiación original, pero, eso sí, actualizando y mejorando los materiales e incluyendo mejoras tecnológicas. Equilibrio de fuerzas perfecto que descubrimos paso a paso en este artículo.

Espacios abiertos

Vivienda Unifamiliar en casco histórico protegido, emase emase ห้องนั่งเล่น

Aunque por fuera conserve su carácter, la vivienda por dentro ha sido totalmente modernizada. El uso del blanco, no solo en la pared, sino también en el pavimento, crea cierto aire futurista. Pero que nadie crea que lo que vemos aquí es un salón frío, al contrario, la pared de pizarra en la que está incrustada la chimenea aporta el toque cálido y familiar a un salón abierto que se comunica con el comedor al fondo y la cocina al otro lado. 

Además, el suelo no necesita ser de madera para invitarnos a pasear descalzos, lo que necesita es poner a nuestros pies la calefacción. Y eso es exactamente lo que ocurre aquí, ya que se ha instalado calefacción por suelo radiante. 

Una cocina con isla

Vivienda Unifamiliar en casco histórico protegido, emase emase ห้องครัว

Siguiendo el estilo que nos encontrábamos en el salón, esta cocina también presenta un aire moderno y actual, donde, sin embargo, no falta un techo al que se le ha despojado de su cubierta, dejando ver la estructura de vigas de la habitación. En esta cocina de líneas minimalistas no podía faltar una isla, en esto caso península, ya que se adosa a la pared, donde además de un amplio espacio para cocinar se ha creado un rincón offíce para los desayunos y las comidas más informales.

Detalles anacrónicos

Vivienda Unifamiliar en casco histórico protegido, emase emase ห้องนั่งเล่น

Volvemos al espacio central de salón para fijar nuestra atención en un pequeño elemento. Y es que en este salón de blancos y de negros, de muebles de diseño lacados y detalles en metal, también hay hueco para pequeñas piezas en madera que rompen el aire futurista y moderno de la habitación. Es el caso de ese pequeño mueble auxiliar en madera que no pasa desapercibido. Sus detalles en rojo, su línea tradicional y el fuerte contraste con el resto de piezas de la estancia lo convierten en un discreto protagonista de la misma.

Fuentes de luz

Vivienda Unifamiliar en casco histórico protegido, emase emase ห้องทานข้าว

Sin apenas transiciones, un hueco que no se ha tapado por ninguna puerta, pasamos del salón al comedor. La elección no es casual, ya que de esta forma el salón puede beneficiarse de la fuente de luz de esta habitación. Además, los grandes ventanales son los protagonistas indiscutibles de la habitación, los que le dan el carácter luminoso y único a la misma. Por si fuera poco, dos claraboyas en el techo dejan paso a la luz cenital.

Acogedor y moderno

Vivienda Unifamiliar en casco histórico protegido, emase emase ห้องทานข้าว

Seguimos en el comedor, una larga mesa blanca arropada por las clásicas sillas Eames. Pero no es de decoración de lo que queremos hablar, sino de las nuevas técnologías que la reforma ha introducido en la vivienda: fachada transventilada, que permite un mejor aislamiento y domótica para el control de todas las instalaciones. 

Una pizca de color

Vivienda Unifamiliar en casco histórico protegido, emase emase ห้องน้ำ

Nos asomamos un breve instante para comprobar que la vivienda no solo utiliza el blanco y negro, sino que también ha buscado matices en color. En este cuarto de baño, el revestimiento con el que cubrimos una parte de la pared tiene un intenso y luminoso color naranja.

Hasta aquí esta vivienda en un edificio protegido. Si quieres seguir leyendo sobre este tipo de proyectos, te recomendamos el artículo The Loft Apartments: un proyecto en Las Palmas.

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