7 errores comunes que debes evitar en tu armario (o en el vestidor)

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Armarios y vestidores son dos herramientas básicas sobre las que asentar la organización del hogar. Ambas soluciones de almacenamiento constituyen un pilar fundamental para el mantenimiento del orden de ropa, accesorios, zapatos y demás enseres que, de otro modo, amenazarían el status quo de tus habitaciones. Su funcionalidad no está exenta de verse mermada si no se les presta la atención apropiada. 

El desorden en su interior, la ausencia de mecanismos que garanticen su condición de garantes de la organización o la indiferencia a la hora de distribuir en ellos cada uno de los objetos que guardarán, puede ser fatal. Para combatir el drama que supondría contar con una solución de almacenamiento que no cumpla con su cometido, en este libro de ideas recopilamos para ti 7 errores capitales a evitar en el vestidor. 

1. Desorden

Parece una paradoja pero no resulta extraño que el desorden reine en el interior de un vestidor. Tener un armario desordenado es como tratar de hacer música con una guitarra sin cuerdas ¿qué sentido tiene? Ninguno. Por eso lo primero que has de hacer es terminar con este error común en el vestidor. Abandona la senda de la desorganización, ese aspecto de ropa amontonada que en nada beneficia a la selección del conjunto ideal para cada ocasión. Organiza el interior de tu vestidor, dale aire y permite que te inspire solo con abrir sus puertas. 

Puedes establecer una disposición por colores, ropa de temporada o tipo de prenda. Sea cual sea, le dará una armonía que agradecerás no solo estéticamente, sino también en el plano funcional. 

2. Cajas sin identificar

Las cajas son, sin ningún género de dudas, grandes aliadas a la hora de organizar tu vestidor. No obstante, otro de los errores capitales que has de evitar en su interior tiene que ver, precisamente, con una incorrecta gestión de estas soluciones de almacenamiento. Está muy bien que dispongas tus pertenencias en cajas de distintos tamaños, formas o colores pero ¿sabes qué hay en cada una de ellas? Es posible que las llenaras hace tiempo y, por desgracia para muchos, la memoria suele ser frágil. Identifica su contenido colocando etiquetas originales o una tipografía atractiva que sirva al mismo tiempo para añadir encanto a la decoración de su interior. 

3. No disponer de un espejo de cuerpo completo

Si tenemos en cuenta que un vestidor está pensado, fundamentalmente, para organizar ropa, zapatos y complementos ¿por qué renuncias a optimizarlo al máximo? No contar con un espejo de cuerpo entero en su interior es otro de los errores más frecuentes a evitar a la hora de diseñar tu vestidor. Además de devolverte una imagen del outfit elegido para saber si has acertado, un espejo te permitirá hacer que el espacio del vestidor parezca más grande. Disponer de un espejo pequeño está bien pero mucho mejor que sea completo. 

4. Una mala iluminación

Te gusta elaborar tus alimentos con una superficie bien iluminada, no soportas trabajar sin la lámpara correcta para evitar el estrés visual, en tu salón no faltan luces tenues para crear una atmósfera agradable… ¿Y qué pasa con tu vestidor? La iluminación es muy importante en un espacio que, con frecuencia, adolece de falta de luz natural propia. No cometas el error de obviar una correcta iluminación en esta estancia, una luz adecuada te ayudará a gestionar mejor su interior así como a decantarte por las prendas más acertadas.

5. Saturación

No siempre resulta sencillo reservar una estancia de la casa al diseño de un vestidor. Si eres de los afortunados que ha podido o está pensando en transformar una habitación en un espacio pensado para contribuir a una correcta organización de la casa, presta atención. Uno de los errores capitales que has de evitar si te encuentras en esta tesitura es saturar e espacio con multitud de piezas de mobiliario y texturas que, lejos de contribuir a su funcionalidad, se conviertan en un estorbo y fuente del caos. 

6. Dejarlo abandonado

Diseñar tu propio vestidor es un proceso que, una vez culminado, no has de abandonar a sus suerte. Es posible que delimitar un espacio que sirva a las necesidades de organización de tu hogar termine por convertirse en una fuente de desorden si no lo cuidas. Con el paso del tiempo puedes volver a acumular pertenencias que amenacen la armonía de esta solución de almacenamiento, por eso te proponemos evitar este error en tu vestidor practicando el desapego. Deshazte de aquello que no necesitas para mantenerlo siempre en perfecto estado de revista. 

Mantén el orden en tu armario

Lo mismo que decíamos al respecto de tu vestidor puede trasladarse al armario del dormitorio, la entrada o el pasillo. Sea cual sea la ubicación de esta pieza del mobiliario, recuerda que la mejor manera de sacar el máximo partido a su funcionalidad es mantenerlo limpio y ordenado. Más allá del tamaño o el estilo del que disponga, su organización interna es fundamental para cumplir con su cometido y garantizar un orden en equilibrio y armonía. No lo utilices como trastero y, mucho menos, para esconder aquello que trastorne la apariencia de tu hogar. 

7. Un error de cálculo

Una de las virtudes de cualquier armario o vestidor es que te ofrece el escenario perfecto para colocar prendas y accesorios de distinta naturaleza y tamaño. Sin embargo, una correcta organización se basa en un planteamiento dinámico y bien estructurado de modo que, sino es posible colocar un estante concreto, una cajonera o una caja, adapta los compartimentos a la superficie útil y evita el error de amontonar tus cosas sin orden ni concierto. 

¿Quieres que tu vestidor sea perfecto? Encuentra todas las claves en nuestro libro de ideas: Vestidores: 9 Consejos para aprovecharlos al máximo.

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