Japón, pequeño país conformado por más de 6.000 islas y situado en el Océano Pacífico al este de Asia, es una de las grandes potencias económicas mundiales. En realidad, es la tercera mayor economía mundial luego de Estados Unidos y China y tiene una inmensa densidad poblacional.
Cerca del 73 % del país es montañoso, existe muy poco terreno llano en Japón por lo que muchas colinas y laderas son aprovechadas en su totalidad para el cultivo y debe extremarse el análisis para la construcción de viviendas. Además se encuentra situada en una zona de mucha actividad volcánica por lo que resultan frecuentes temblores, tremendos terremotos y hasta tsunamis que provocan gravedades extremas.
Luego de la Segunda Guerra Mundial, Japón necesitó reconstruir su país casi de cero y esto supuso un gran estímulo para la arquitectura japonesa. Y como en tantos otros aspectos de su cultura este rubro experimentó un gran salto moderno y tecnológico.
En este libro de ideas, queremos presentarles un representante de esta arquitectura plasmada en una pequeña pero encantadora vivienda familiar, donde el aprovechamiento del espacio es vital.
Con un diseño moderno pero respetando algo del estilo tradicional japonés, una encantadora vivienda cómoda y confortable con un amplio jardín al frente.
Desde el interior, en la comodidad funcional del ambiente integrado, se contempla el hermoso paisaje exterior a través de los amplios ventanales. Estos aseguran la entrada generosa de luz natural.
Cuando el momento lo requiera, la habitación puede compartimentarse y trasformar todo el ambiente.
Materiales nobles pero cálidos, estilo minimalista y despojado, donde priman la funcionalidad y la practicidad. Con colores neutros y decoración simple se logra un ambiente suave y acogedor, donde una chimenea tiene un papel protagonista.